Cómo tomar spirulina. Recetas
La espirulina es un polvo natural que es increíblemente alto en proteína y una buena fuente de antioxidantes, vitaminas B y otros nutrientes. Cuando se extrae correctamente, es uno de los alimentos con más fuentes de nutrientes.
Está compuesta principalmente por proteínas y aminoácidos esenciales y por lo general se recomienda a los vegetarianos y veganos por su alto contenido en hierro natural.
Las dos formas más comunes de encontrar la spirulina comercialmente es en polvo o en tabletas. También se suele incluir como ingrediente en mezclas de polvos proteicos.
Algunas personas encuentran el sabor de la spirulina ligeramente salado, a como un trago de agua salada, ese es el sabor de la spirulina, desagradable para muchas personas. Aunque su sabor intenso puede ayudar a compensar el dulzor de los batidos o los zumos.
Pero no te preocupes, puedes llegar a cogerle el gusto a este sabor. Pero mientras tanto, lo puedes añadir a algunas recetas que atenúen ese sabor oceánico y presentar la spirulina algo más apetecible.
Para incluir la spirulina en tu dieta diaria, puedes mezclar una cucharada pequeña de polvo de spirulina en un vaso de agua o zumo y beberlo directamente, o puedes añadirlo a un batido.
Pero ten cuidado, sólo una pequeña cantidad de spirulina cambiará el color de tu bebida a un verde profundo, casi negro. Y después no te olvides de beber un vaso de agua para eliminar el color verdeazul de tus dientes.
También puedes encontrar spirulina en ciertos postres de algunos restaurantes de comida sana. A veces se añade a los brownies de chocolate o a las trufas.
Si vas a utilizarlo en batidos, zumos o smoothies, puedes equilibrar el sabor general combinando el polvo de spirulina con frutas dulces como plátano, piña y mango.
Lo puedes mezclar con 2 cucharaditas de comino, pimentón y chile en polvo, y espolvorearlo sobre una ensalada mexicana o en el horno con patatas asadas.
Espolvorea 1 cucharada de spirulina en polvo sobre las palomitas de maíz recién estalladas.
En un guacamole con 2 aguacates pelados, el zumo de 1 lima, 1 tomate picado y sal, pimienta y ajo en polvo al gusto. Añade 1 ó 2 cucharadas de polvo de spirulina a los ingredientes del guacamole y mezcla bien.
Haz tu propio chocolate de spirulina derritiendo una barra de chocolate negro ecológico al baño María, añadiéndole 1 cucharadita de polvo de spirulina y dejando que se vuelva a solidificar otra vez.
O una bebida para después de hacer ejercicio. Con 2 tazas de agua filtrada, 1 cucharada de zumo de limón, 1 cucharadita de jarabe de arce o azúcar de coco, 1 cucharadita de polvo de spirulina, 2-5 gotas stevia (opcional) y una pizca de sal marina.